lunes, noviembre 20, 2006

Gral Bendini, entre el deshonor y la muerte, rumbo a la nada.

AMIGOS DE LA LIBERTAD

- Qué paradoja sería de que entre los desaparecidos del Dámaso Centeno, recientemente homenajedos con una placa en la institución dependiente del Ejército, hubiere alguno de los responsables del asesinato del Capitan Viola y de su hijita Cristina, allá, por diciembre del 74 cuando la Comandante en Jefe del as Fuerzas Armadas era la señora Maria Estela Martinez Cartas viuda de Perón.

- Muchos argentinos......... ¿-cuántos.....? ¿todos....?

- ¡ NO, todos no...! Pero sí, casi todos.........

- Hombres, mujeres, grandes y chicos, padres, madres..... hasta incluso extranjeros..... casi todos hoy somos un poco Violas, tristes, amargados, preocupados, todos aquellos que morimos un poco cuando murieron Humberto Antonio y Cristinita, porque nosotros también morimos un poco aquel fatídico 1º de diciembre del 74 cuando el tableteo de las metrallas de la juventud idealista quemaba las carnes de los indefensos e inocentes en las calles del Tucumán.

- Sepan, los nuevos, los jóvenes, intoxicados con historia podrida y venenosa, sembrada hoy desde el poder y repartida desde las aulas y desde las cátedras, desde la prensa y la radio, desde la televisión, que el fraude no prosperará, que tarde o temprano habrá justicia, que muchas cuentas que hoy no cierran se saldarán, que hasta el pelo más delgado hace su sombra en el suelo y por sobre todas las cosas, que la iniquidad será desterrada de esta Patria bendita a la que Dios en su infinita misericordia no ha de abandonar y que por esas cosas que a veces suceden sin que nadie las espere, allá están Humberto y Cristina, en la guardia del Señor, presentes, para que nadie lo olvide y guay de lo que les espera a aquellos que hirieron a Dios, más les valiere atarse una piedra de molino al cuello y echarse a lo más profundo del mar, porque, entre el escándalo y el crimen no hay gran diferencia.

- Con todo respeto, para el dolor de la Patria, un recuerdo sincero, -al soldado y a su familia,- desde la impotencia de no poder hacer más.

gm

NB/// I)Abajo, la Carta documento, que hoy circula en Internet, por mano de la familia de los mártires inmolados en tan aciaga jornada, al señor Jefe de Estado Mayor General del Ejército Tte. Gral. Roberto F. Bendini.con un desolado mensaje de recuerdo y dolor.

II) El próximo 21 de noviembre se celebra la festividad del Primer Santo Argentino, inmolado a los 24 años por las balas comunistas en España de 1934: SAN HECTOR VALDIVIELSO SAEZ, martir por la fe.

III) San Héctor, acuérdate de Humberto y de Cristina, también de todos nosotros, que te pedimos que intercedas por nuestra Patria y por todos tus hermanos que recurrimos a vos.

IV) Como estos crimenes no se catalogan de "lesa humanidad", los autores se hallan todos en libertad.

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CORREO ARGENTINO

CARTA DOCUMENTO

Nº 4010905100

Yerba Buena, Tucumán, 15 de Noviembre de 2006

Al Jefe del Estado Mayor General del Ejército

Tte Grl. D. Roberto Fernando Bendini

PRESENTE

Cuando el 10 de diciembre de 1974 - en plena vigencia de un gobierno constitucional - la delincuencia terrorista se llevaba de un zarpazo traicionero, cruel e inhumano las vidas de mi esposo, My (pm) Humberto Antonio Viola y de mi hijita María Cristina, de tan solo tres años, la Patria se cobraba, ahí, en el campo de batalla de una sucia guerra iniciada por ideólogos del terror, una de las facturas más perversas de la historia de la llamada "Década del 70".

Fueron dos vidas que, por lo cobarde y cruento del atentado, marcaron a fuego el triste pasado de nuestra nación. Este hecho fue mucho más allá que los secuestros, que los atentados, que los crímenes, que la pesadilla que ya había desatado la delincuencia subversiva en el país.

De ahí en adelante, el asesinato de mis dos seres queridos fue un símbolo para toda la ciudadanía de bien, para toda la ciudadanía que a partir de entonces supo a que debía atenerse, que clase de lucha tenía que enfrentar.

En lo personal, tuve que asumir con fortaleza y toda la ayuda de Dios, el difícil oficio de vivir.

Sin embargo, ¡La Patria se Salvó!

Cómo no salvarse si desde el Cielo había un SOLDADO, sí, así, con mayúsculas, custodiándola. Un soldado que ofrendó su vida luchando por defender no solo a nuestra familia que estaba siendo diezmada por las balas asesinas, sino también por su país, por su gente, por su tierra.

Cómo no salvarse sí en el Cielo había un ANGEL más en el Ejército de Díos, María Cristina, que la protegía, que nos amparaba, que nos bendecía con sus manitas inocentes y que, seguramente, por ser tan pequeña, ÉL le concedía todo aquello por lo cual intercedía.

Desde aquel fatídico 1º de diciembre, todos los años, indefectiblemente y sin tener en cuenta las condiciones c1imáticas, la Institución que hoy Ud. dirige, llevó a cabo los actos en homenaje a este soldado de la Patria y a su hijita, que entregaron sus vidas en aras de una Argentina Libre de toda ideología foránea y contraria al sentir cristiano que siempre caracterizó a nuestro pueblo profundamente católico.

En el último homenaje, realizado el 1º de diciembre de 2005 en el Cementerio de Yerba Buena, Provincia de Tucumán, fue notable la diferencia que observé respecto de los homenajes de años anteriores. ¡Con que liviandad y ligereza se "homenajeó." a los caídos!

No me queda duda alguna que fue .el resultado de órdenes superiores.

Como tampoco me quedan dudas que por la misma razón los oficiales y suboficiales que asistieron al acto fueron vestidos de civil SIN UNIFORMES. jQue tamaño irrespeto!

En la página web del Sitio Oficial del Ejercito Argentino la propia Institución, en In Memorian, reza textualmente

"El Ejército rinde su más sentido y profundo homenaje a los caídos en las luchas internas de las décadas del 70 y 80. Lo hace para mantener vivo el recuerdo de los oficiales, suboficiales y soldados que ofrendaron lo más valioso que un ser humano puede dar: su propia vida. Su memoria permite valorar las irreparables pérdidas sufridas durante esos años de enfrentamientos fratricidas" .

¡Que distancia abismal separa tan hondas y sentidas palabras con las mezquinas actitudes asumidas en los homenajes!

Me .pregunto: Porque? Cual es la razón, si existe alguna, que pueda yo entender? Dónde quedaron los profundos valores inculcados en El Palomar, sede del gloríoso Colegio Militar de la Nación? O es que acaso el My (pm) Humberto Antonio Viola, caído en defensa de los intereses de la Patria no tiene ganado el derecho de ser homenajeado con Honor y Dignidad?

O es que solamente gozan de tan alto privilegio por parte del Ejército los subversivos muertos, como quedó plasmado en el acto llevado a cabo en el Instituto Dámaso Centeno, dependiente de esa Institución, para recordar a "desaparecidos" en los años 70, llegándose, inclusive, a colocar una placa en memoria y homenaje a terroristas?

Pero no podrá Ud. explicarme lo ínexplicable. Es por todo ello el profundo sentimiento de decepción que me invade y me provocan estas espurias situaciones.

Atento al supuesto de que esa Fuerza Ejército haya previsto la ejecución de algún tipo de acto:

SOLICITO A UD. Y POR SU INTERMEDIO A SUS SUBALTERNOS

QUE SE ABSTENGAN DE REALIZAR ANTE LA TUMBA

DE MIS MUERTOS QUERIDOS

NINGÚN HOMENAJE

INSTITUCIONAL.

Humberto y Maria Cristina merecen, en un homenaje, el más Grande Respeto No permitiré que nadie que carezca de valor para hacerse cargo de sus acciones, ni siquiera pise la tierra donde yacen dos Grandes de Espíritu y Moral.

Atentamente.

MARIA CRISTINA PICON

YERBA BUENA - TUCUMAN