sábado, marzo 03, 2007

Con la cabeza en las urnas, el kirchnerismo indujo una movilización al Congreso para inaugurar las 125º ordinarias




01 Mar 2007 - 12:38
Con la cabeza en las urnas, el kirchnerismo indujo una movilización al Congreso para inaugurar las 125º ordinarias

Los intendentes y piqueteros adictos, bajo pena de represalias para los que no concurran, respondieron al llamado aunque el temporal aguó el acto. En esta oportunidad, otra vez, el Gobierno K necesitaba del apoyo del "aparato" admitiendo la asistencia de micros llenos a la plaza para mostrar señales de consenso. Esta es otra de las contradicciones, el Presidente no es simpatizante de las concentraciones del viejo peronismo porque le ahuyentan el voto moderado, pero cuando necesita del apoyo del aparato, consiente que le lleven micros llenos a la plaza para mostrar alguna señal de fuerza.
Se esperaba que en las inmediaciones del Parlamento se reunieran 30.000 piqueteros y militantes del PJ bonaerense...

Tras bambalinas, la pelea de hoy sería entre los movimientos sociales para ver quiénes serán los más convocantes.

“Ya se estaba discutiendo ese tema. Parrilli reunió a Pérsico, D´Elía, y Ceballos y les pidió que por lo menos haya 5.000 personas en las puertas del Congreso”, agregó un fuente. Incluso la Casa Rosada convocó a movilizar gente a 30 intendentes bonaerenses y a las cuatro organizaciones sociales y piqueteras más afines al kirchnerismo, las que lideran D'Elía, Jorge Ceballos, Emilio Pérsico, y Edgardo Depetris (Frente Transversal).

Pero el temporal aguó el acto en el cual Kirchner soñaba con reunir a una multitud -que hace política pero no trabaja- alrededor del Congreso nacional al pronunciar el que podría ser su último discurso como presidente frente a la Asamblea Legislativa.

El Presidente sabe eludir conflictos gremiales y reclamos varios. Por ese motivo suspendió un
viaje a Mendoza...

Desde 2004, el presidente Kirchner buscó infructuosamente que su mensaje al Congreso fuese acompañado desde la calle por miles de personas. Entre otras cosas, Kirchner planea enfocar su mensaje en la recuperación económica y del empleo ayer se conoció que la desocupación bajó a 8,7%. Acto seguido el Gobierno eliminó un beneficio: anuló la doble indemnización.

Sin tener en cuenta que casi el 40% de los ocupados realizan tareas “en negro”, es decir que sus empleadores no cumplen con los aportes de ley, ni tampoco a los beneficiarios de los planes Jefes y Jefas de hogar (cautivos por el gobierno nacional) y los subocupados, sin esperar un segundo y de inmediato lo primero que hizo el Gobierno fue anunciar la eliminación del régimen de doble indemnización, como si no existieran razones para mantenerlo toda vez que el porcentaje de desocupación anunciado no incluye todas las variables de mercado laboral argentino en el que reina aún un alto porcentaje de empleo no registrado.

La opinión de los laboralistas: el empleo sigue con muchas deudas

El presidente de la Comisión de Legislación Laboral en Diputados, Héctor Recalde, sugirió que el plus debe mantenerse "hasta que se estabilice la caída de la desocupación". En ese sentido, Recalde explicó que "en el primer trimestre siempre cae" la ocupación, es decir aumenta el desempleo, por lo que estimó que "hay que tener estabilidad para poder decir que estamos en un dígito".
Lo mas probable es que el Gobierno enfríe esa iniciativa por lo menos por este año, ya que puede
ser una medida impopular en un marco de campaña electoral.
La doble indemnización por despido (que actualmente es 1,5 veces la indemnización legal) fue
implantada en 2002 cuando el índice de desempleo había superado el 20%.

Según Juan Luis Bour, Economista especialista en mercado laboral de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL), el empleo sigue con muchas deudas.

"Cuando hay un desempleo alto el crecimiento económico permite que el empleo crezca en todos los niveles. En el último tiempo hay dos aspectos importantes: se observa que los que quedan desocupados tienen una preparación inferior a la que uno tenía para hace tiempo, es decir, gente muy joven con muy poca experiencia y también con poca calificación para los puestos que demanda el mercado.

Hoy, para encontrar población con experiencia y alta calificación, hay que buscarla en otras empresas y no entre los desocupados.

Hay que apuntalar primero a la educación secundaria, un déficit que todavía tenemos en la Argentina. No mucha gente termina este nivel de estudio y muchos otros tienen un nivel de preparación bajo.

También hay que buscar que no se ocupen cargos con tareas ineficientes. El sector estatal argentino en todos los niveles ocupa a 2.300.000 personas ofreciendo un margen importante para que se rote personal a actividades más productivas.

Además, el país ofrece altos costos tanto para contratar, rotar o despedir. Hay toda una agenda de reformas legales que no se hicieron y que en el mediano plazo va a significar que Argentina permanezca con desempleo alto a pesar de que crezca. Vamos a volver a una vieja situación que se dio en los '90: alto crecimiento económico y baja generación de empleo."