martes, abril 24, 2007

Tortuosas


EDITORIAL

Tortuosas

De un plumazo y sin debatir uno u otro, el Congreso aprobó 42 decretos de necesidad y urgencia firmados por Néstor Kirchner, muchos de los cuales no tenían ninguna urgencia y algunos tampoco verdadera necesidad. Pero forman parte del juego presupuestario tramposo que inventó Roberto Lavagna, y sigue aplicando el actual presidente. Consiste en subvaluar los ingresos futuros, y cuando se registra mayor recaudación, distribuir el excedente entre provincias y reparticiones, directamente, por las facultades que el mismo "congreso-escribanía" le otorgó al Jefe del Gabinete; o atribuyéndolo directamente, por decretos de necesidad y urgencia, en lo que Alfonso de Prat Gay caracterizara tan bien como: "la relación tortuosa entre la Nación y la economía de las provincias".
Y cuando el Estado deje de tener la plata ¿qué va a pasar? Porque la recaudación crece al 25% anual, pero el gasto público lo hace al 40%.