Burrumayo al Norte, la pared y el perro.
Breve historia del perro y la pared, ocurrida el 11 de Septiembre de 2007
Lo natural, cuando el perro orina la pared.
CHILE
Sangrienta madrugada en Chile: un oficial muerto y decenas de heridos
Los choques se produjeron en el marco del 34º aniversario del golpe militar de Pinochet. Pero participaron además delincuentes armados con ametralladoras y fusiles. El carabinero murió de un tiro en la cabeza. Combate. Una patrulla abre fuego con metralletas en plena noche en las afueras de Santiago, cuando crecen los choques.
Fue un 11 de setiembre distinto a la historia de los aniversarios del Golpe de Estado desde que Chile recuperó la democracia en 1990. Si durante el día los disturbios fueron mínimos y la figura de Augusto Pinochet inexistente, al caer la noche, las calles se vaciaron y en el cordón que rodea Santiago y marca la frontera donde se dispersa el mundo de los pobres, se encendieron las fogatas y desde las improvisadas barricadas surgieron los batallones de una guerra tan brutal como sorpresiva.
Al despuntar el alba el balance fue desolador. Un policía muerto luego de que un disparo a corta distancia desde la oscuridad de las barricadas le traspasara el casco, le explosionara el cráneo y destruyera su masa encefálica; otros 41 policías lesionados, uno de ellos grave por las heridas que le provocó una botella con ácido que le reventó en la cara; 230 detenidos, de los cuales 72 menores y varias escuelas, casas, locales comerciales y sitios públicos saqueados por una turba que actuó con una violencia que hacía muchos años no se apoderaba de la periferia capitalina.
Los testimonios recogidos en las poblaciones que hace algunos años libraron una dura batalla contra la dictadura y donde hoy se concentra el núcleo duro del 13,7% de pobreza, revelan que sus habitantes vivieron una larga noche de terror.
Y no se la esperaban. Porque el efecto Bielsa se hizo sentir. No es un misterio que muchos prefirieron el martes quedarse frente al televisor paladeando el partido de fútbol que libraba la selección de Chile frente a Austria, dirigida esta vez por el argentino Marcelo Bielsa, antes que salir a protestar. El triunfo de Chile contentó las calles, subió las loas a Bielsa, convertido sin que lo supiera en el principal antídoto contra la protesta.
Pero en la noche todo fue distinto. Sin embargo la violencia no estuvo ligada a un marco político. Y la prueba fue el saqueo que devastó siete escuelas de poblaciones pobres. Ayer en la mañana mas de cien mil pobladores estaban sin luz eléctrica y mas de mil niños se habían quedado sin la única comida diaria que reciben gratis en sus colegios.
Al primer policía asesinado por manifestantes en democracia se sumó la constatación del uso de armas automáticas por los vándalos lo que obligó a una dramática retirada de los policías que protegían locales comerciales, casas y escuelas en Pudahuel Sur.
"Empezaron a atacar desde tres frentes distintos. Fue una cantidad enorme de disparos. Ni siquiera los disuasivos lacrimógenos los detenían", relató el mayor Ramón Alvarado, jefe de la comisaría a la que pertenecía el cabo asesinado.
Ayer en la mañana, mientras en los tribunales una atribulada madre de un joven de 15 años detenido portando bombas molotov, afirmaba con la voz entrecortada "yo no sé qué hacía mi hijo, yo trabajo todo el día...", en La Moneda se daba inicio a una Cumbre de Seguridad, encabezada por el ministro del Interior Belisario Velasco, jefes policiales y los fiscales que llevaran la investigación de los efectos de una jornada de alta violencia. El tema principal de la reunión de alto nivel fue la investigación en marcha para determinar la procedencia de las armas automáticas.
Michelet Bachelet afirmó que se utilizarán todas las herramientas legales para encontrar a los responsables de la muerte del cabo, las lesiones a policías y los saqueos.
Fue tal el impacto que provocó lo ocurrido que hasta el ex presidente Ricardo Lagos llegó hasta La Moneda y se reunió en privado con Bachelet. "Lo que se vio ayer es desnaturalizar totalmente lo que es una fecha que tiene que hacer meditar a los chilenos y es parte de nuestra historia. Ayer no hubo protestas, hubo actos vandálicos y los actos vandálicos deben reprimirse", dijo.
Una respuesta marcó la jornada. La del jefe de la Policía, general José Alejandro Bernales, al explicar por qué ayer fue imposible repeler de la misma manera los ataques con armas automáticas que recibieron sus hombres: "Cuando un carabinero se enfrenta a una persona que le dispara, un delincuente, y sabe realmente que esa es la persona que dispara, él puede repeler ese ataque, pero cuando hay cincuenta o cien personas amparadas en la oscuridad y pueden haber inocentes, Carabineros sabe perfectamente que no puede ni debe hacer uso de las armas. Anoche se dio una gran muestra de eso". (El Mercurio, 13 de septiembre de 2007)
Respecto a los hechos, el diario CLARIN publica, entre otras cosas, que el empresario y político chileno Sebastián Piñera pidió mano dura a las autoridades, al tiempo que hizo una promesa en caso de resultar electo el 2009. "Quiero decir con mucha claridad que en nuestro futuro gobierno el que atente contra un carabinero con armas de fuego, con bombas molotov lo vamos a perseguir hasta el fin del mundo para que asuma su responsabilidad ante la Justicia". (Clarin, 13 de septiembre de 2007)
El periódico chileno El Mercurio, el 13 de septiembre de 2007, entre otras cosas, señalaba: “En la subcomisaría donde trabajaba Vera (el carabinero muerto) se realizó anoche una misa con presencia del general José Alejandro Bernales (jefe de Carabineros)y gran cantidad de vecinos, que lo aplaudieron. Bernales se comprometió a hacer todos los esfuerzos para aumentar la dotación del sector, ante un pedido de los vecinos. Cambiando los usos tradicionales en la jerarquía policial se despidió con un emocionado: "Mi cabo Vera, descanse en paz".
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Lo antinatural, cuando la pared orina al perro.
ARGENTINA
(De La Nación, 13 de septiembre de 2007)
Santa Cruz: sigue la protesta en la ruta tras los disturbios
Los trabajadores continúan en el lugar y prohíben el paso de vehículos de empresas petroleras; el fiscal aseguró que investigará si hubo "excesos"
Tras los graves incidentes registrados ayer, cuando Gendarmería reprimió una protesta de trabajadores petroleros que cortaban la ruta nacional 3, en Caleta Olivia, los manifestantes retomaron el reclamo en el camino.
Se encontraban esta mañana a la altura de la planta de residuos de Caleta Olivia, donde permiten la circulación de autos particulares, pero prohiben el paso de vehículos de empresas petroleras que se dirigen a los yacimientos y sólo cada una hora habilitan al transporte pesado.
El reclamo de los trabajadores de la empresa de remediación ambiental Empasa consiste en pasar del convenio de trabajadores rurales al de petroleros. El repudio a los choques de ayer agregó otro motivo de protesta.
Sin orden. En tanto, el fiscal federal de Comodoro Rivadavia, Norberto Bellver, reiteró hoy que no emitió ninguna orden "por escrito" para desalojar ayer la ruta 3, a pesar de lo cual sostuvo que la Gendarmería está "autorizada a actuar" ante un caso así. De todas formas, aclaró que investigará si hubo "excesos".
El juzgado federal de Comodoro Rivadavia liberó anoche al dirigente sindical petrolero Jorge Chanampa y lo citarán para declarar en los próximos días.
En declaraciones radiales, el dirigente apuntó al ministro de Trabajo, Carlos Tomada, y reclamó: "No hay solución a nuestro pedido".
Otra visita complicada. Los violentos incidentes estallaron horas antes de la llegada del presidente Néstor Kirchner. De hecho, los gendarmes desalojaron el camino y permitieron el paso de ómnibus que llevaban a militantes kirchneristas al acto de lanzamiento de la candidatura a gobernador del actual mandatario, Daniel Peralta. (De La Nación, 13 de septiembre de 2007)
La pregunta es ¿ Que pasó con el Jefe de Gendarmería a cargo del operativo y el efectivo que habría efectuado el disparo con balas de goma?. La pregunta es porque ambos serán, como siempre, los “patos de la boda” entre los que cortaban la ruta y los militantes k que iban al acto. El fiscal: Poncio Pilatos.
Como otra muestra de la pared orinando al perro, basta recordar la muerte del Policía Jorge Sayago el 5 de febrero de 2006 en Santa Cruz y la toma de la comisaría 24 de la Policía Federal, en la Boca, el 26 de junio de 2004 por parte de Luis D´Elia. ¿Castigos?
