jueves, noviembre 15, 2007

Artículos de mi viejo arcó(43).R.Varela

Artículos de mi viejo arcón…(43)-El Director.

LA DIGNIDAD DEL EMBRIÓN.

“ La Prensa “ .31.I.94.

Por Alberto Rodríguez Varela.

En una importante revista científica, editada en los Estados Unidos, se publicó un estudio con fotografías de experimentos que tuvieron por objeto el transplante de páncreas fetal humano a ratas. Para concretar dichas operaciones, los ratones recibieron las células de veinte criaturas en gestación abortadas al amparo del criterio fijado en 1973, por la Corte Suprema americana en el tristemente célebre caso “ Roe vs. Wade “

En los países que han penalizado la interrupción provocada por la gestación, no sólo ciertos laboratorios de fisiología y farmacología experimental están interesado en comprar fetos humanos. También algunos fabricantes de cosméticos se encuentran comprometidos en ese macabro negocio. En el seminario Nouvel Observateur se ha denunciado que de Roma a Budapest, pasando por Londres, Ámsterdam y París, miles de embriones que tienen su origen en el aborto “ legalizado “ se comercializan para elaborar cremas y ungüentos que se venden a 40 dólares el pote…Incluso la gaceta oficial del Palacio de Justicia en París ha informado que un camión procedente de Europa Central ,cargado de fetos humanos congelados y destinados a laboratorios franceses de productos de belleza, fue interceptado en la frontera suiza por unos estupefactos guardias aduaneros. Lo notable es que dichos agentes públicos no encontraron en la reglamentación vigente ninguna cláusula que les autorizara a impedir que el vehículo continuara con su siniestra carga.
En los últimos años de menosprecio hacia la dignidad connatural a toda persona concebida se ha acentuado. Las aberraciones que el ingenio humano, emancipado de toda moral objetiva puede imaginar y ahora realizar son alucinantes. Los investigadores que solicitaron autorización al Consejo Superior de Sanidad de la gran Bretaña , para transplantar embriones humanos a hembras de cerdo o conejo ponen en evidencia que, extraviada la genuina visión del hombre, desaparecen virtualmente los límites éticos.. Los intentos de obtener fecundaciones mezclando gametos humanos y no humanos constituyen otra manifestación de una creciente anomia moral. El informe de la comisión Warnock, elaborado por asesoramiento británico, los autoriza expresamente en ciertos casos bajo la condición de que “ EL DESARROLLO DE CUALQUIER HÍBRIDO RESULTANTE SEA INTERRUMPIDO A NIVEL DE DOS CÉLULAS “.

La desaprensión hacia los valores deontológico (* ) que se observa en determinados círculos científicos, surge nítidamente de un informe del profesor Edwards precursor y propulsor de la fecundación in vitro - quien reconoce que algunos laboratorios recogen ciertos óvulos y los fertilizan en una probeta sin intención de transmitirlos a ningún útero .Los usan señala Edwards “ de manera semejante a embriones de animales usados en la investigación “.

Graciela Iglesias, en un comentario reciente publicado en La Nación, informa que científicos de la Universidad de Edimburgo están por iniciar la implantación de óvulos extraídos a fetos concebidos con ese objeto. Procurarán traer al mundo niños cuyas madres jamás nacieron y cuyos restos fueron arrojados a un horno incinerador de basura. (**).

No menos escalofriante es el capítulo referido a la experimentación fetal. Sobre las modalidades tenebrosas nos hemos ocupado en el artículo titulado “ Reagan y Clinton : dos posiciones frente al aborto “, publicado en La Prensa el 19-8-1993.

EL DERECHO A LA VIDA..

Parece mentira que en el siglo XX, después de la espantosa experiencia nacional socialista, resulte necesario levantar la voz para defender a los más pequeños, a los más indefensos, a los más discriminados, a los más necesitados de protección. El profesor Jerome Lejeune, al visitarnos en octubre pasado , subrayó la grave incongruencia en que incurren los gobiernos que, al tiempo que derogan penas de muerte para peligrosos criminales, la establecen para inocentes a través del aborto y la experimentación embrional y fetal.

Estos legisladores no han advertido algo elemental que destaca en un profundo opúsculo el Secretario de la Academia Nacional de Derecho de Córdoba, Doctor Olsen A. Ghirardi, en el sentido de que el derecho a la vida no sólo un período, sino toda la vida, desde la concepción hasta la muerte. Porque en lo que es esencialmente es el hombre “ no hay grados “. Como explica J.C. Wilke, cada embrión humano es un ser único que contiene dentro de sí un código genético que le impulsa hacia una existencia adulta. Nada se añadirá a este ser, entre el momento de la fecundación y el de su muerte al llegar la vejez, excepto el tiempo ,la nutrición y el oxígeno. Esta ahí en su totalidad, a la espera de recorrer cada una de las etapas de su desarrollo. No tiene, por ende sentido ni coherencia amparar sólo un segmento de la vida y condenar al otro a la experimentación y a la muerte .La vida es sagrada, antes y después del alumbramiento .Porque como dice un antiquísimo proverbio oriental: el niño al nacer tiene casi un año de vida.

VOLVER A LAS FUENTES.

Isaías, que vivió en el ,siglo VIII a. C. ,exclama en el Canto del Siervo : “ Yahvé desde el seno materno me llamó: desde las entrañas de mi madre recordó mi nombre “ ( 49,1 ). Textos similares encontramos en los Salmos ( 70,6 ) y en Jeremías ( 1,5 ). Resulta así explicable que hoy, no obstante haber transcurrido más de dos milenios, los judíos religiosos, como sus ancestros más remotos, mantengan con firmeza la misma doctrina, fundada en la estricta observancia del 5º Mandamiento recibido por Moisés en el Monte SINAI.( Éxodo , 20,13 ).

También los códigos más antiguos y los paganos griegos y romanos más ilustres, defendieron la vida por nacer. Baste recordar el Código de Hammurabi , el Libro de losVedas, y las leyes de Manú, y los nombres de Solón, Licurgo, Hipócrates, Suetonio, Séneca, Juvenal y Ovidio.

Para el Cristianismo, el valor del hombre, de todo hombre, inmensurablemente unido al misterio de la Encarnación del Verbo. Como lo explica el Padre von Ustinov, “ Jesucristo en el vientre de María no es una masa de protoplasma, sino la persona divina subsistente en una naturaleza humana desde el momento mismo de pronunciar la Virgen su FIAT ! hágase ahí mismo VERBUM CARO FACTUM EST, , el verbo se hizo carne “. Es éste un misterio de , que excede la capacidad de comprensión de la inteligencia humana, y frente a la cual los cristianos doblamos la rodilla. Es mismo lleva también al reconocimiento de la dignidad connatural de toda persona concebida porque, de acuerdo con el mandato evangélico, debemos ver Cristo en todo prójimo, especialmente en los más pequeños y necesitados de protección ( Mat. 25,40 ). Y no hay nadie más indefenso que la persona por nacer.

La tradición griega, romana, hebrea y cristiana, de riguroso respeto al nasciturus , inspiró las leyes sancionadas bajo su influjo durante dos mil años .Resulta por ello sorprendente que en el final de este contradictorio siglo XX, cuando se proclama a diario la intangibilidad de los derechos humanos, se haya extendido a lo largo del planeta la negació0n más completa del primero y fundamental : el derecho a nacer y morir .Solzhenitsyn ha dicho, recientemente, que una de las mayores sorpresas de la centuria es la expansión impresionante del materialismo y del relativismo en los pueblos de aneja tradición espiritualista..

Vivimos bajo el signo de una apostasía planetaria que nueve a prescindir de valores que hasta hace pocas décadas parecían incontrovertibles.

Urge volver a Dios para recuperar la verdadera dimensión del hombre porque hemos sido creados a Su imagen y semejanza ( Gén.1,26 ). Por haberlo prescindido de ese origen, los pueblos han extraviados el camino, aceptando aberrantes criterios legislativos.

Es necesario poner fin a la matanza de inocentes. Hay que volver a las fuentes. Para ello el mundo todo, sin distinción de creencias, con en Dios o al menos en el hombre , debe comenzar por observar el principio elemental de la bioética, claramente definido por Juan Pablo II en su reciente discurso del 20 de noviembre de 1993 : “ Todo ser humanos- dijo el Papa – ha de ser considerado y respetado como persona desde el momento de su concepción “-

(*) Deontología: Al entender de esta Director, es la ciencia de los Deberes y Derechos que se deben respetar.

(**) ¿ No os hace recordar los “ campos de exterminio con sus hornos incinidadores “?…