lunes, diciembre 01, 2008

[Red de Catequistas] Los 7 Dolores de María

Los 7 Dolores de María
¿Cómo se practica esta devoción? (se recomienda hacerla diariamente)

1-Como toda oración la comienzo pidiendo perdón por mis pecados, puedes hacerlo con tus propias palabras o con el siguiente Acto de contrición:
"Señor mío, Jesucristo, me arrepiento profundamente de todos mis pecados. Humildemente suplico tu perdón y por medio de tu gracia concédeme ser verdaderamente merecedor de tu amor, por los méritos de tu Pasión y Muerte y por los dolores de tu Madre santísima"

2-Oración preparatoria
Virgen Inmaculada, madre de Piedad, llena de aflicción y amargura, te suplico ilustres mi entendimiento y enciendas mi voluntad para que con espíritu fervoroso contemple tus santos dolores y pueda conseguir las gracias prometidas a los que reflexionen sobre tus sufrimientos. Amén.
3-Rezar un Ave María por cada dolor mientras lo meditamos.
Quienes quieren hacer una meditación más profunda rezan un Padre Nuestro, 7 Ave Marías y un Gloria por cada dolor.
María quiere que meditemos en sus dolores, por eso estamos invitados en cada dolor a leer la cita bíblica o recrear el momento en nuestro interior, tratando de vivir lo que experimentó el Corazón de Nuestra Madre. Puede ayudarnos cerrar los ojos al orar el Ave María para seguir "compartiendo" ese momento doloroso con María.
Primer dolor: La profecía de Simeón,( se puede leer Lc 2, 22-35)
Breve meditación (por ejemplo : "Me compadezco, Madre Dolorosa, por el dolor que padeciste con el anuncio de Simeón cuando dijo que tu corazón sería el blanco de la Pasión de tu Hijo. Haz, Madre Mía, que sienta en mi interior la Pasión de tu Hijo y tus dolores" U otra que surja en tu interior en ese momento).
Rezar 1 Ave María .
Segundo dolor : La persecución de Herodes y la huida de la Sagrada Familia a Egipto (leer Mt 2, 13-15)
Breve meditación (por ejemplo:" Me compadezco, Madre Dolorosa, por el dolor que padeciste en el destierro a Egipto, pobre y necesitada en aquel largo camino. Haz, Señora, que sea libre de las persecuciones de mis enemigos" u otra que surja en tu corazón)
Rezar un Ave María .
Tercer dolor :La pérdida del Niño a los 12 años en el templo de Jerusalén por 3 días (leer Lc 2, 41-50)
Breve meditación (por ejemplo: "Me compadezco, Madre Dolorosa, por el dolor que padeciste con la pérdida de tu Hijo durante tres días en Jerusalén. Concédeme lágrimas de verdadero dolor para llorar culpas por las veces que he perdido a mi Dios y que lo halle para siempre" u otra reflexión que surja en tus interior).
Rezar un Ave María.
Cuarto dolor : Su encuentro con Nuestro Señor Jesucristo cargado con la cruz, en la calle de la Amargura
Breve meditación (por ejemplo: " Me compadezco, Madre Dolorosa, por el dolor que padeciste al ver a tu Hijo con la cruz sobre los hombros, caminando al Calvario con escarnio, baldones y caídas. Haz, Señora, que lleve con paciencia la cruz de la mortificación y de los trabajos cotidianos" u otra que surja espontáneamente en ti).
Rezar un Ave María.
Quinto dolor: La crucifixión de Jesús (leer Jn 19, 17-39)
Breve meditación (por ejemplo: " Me compadezco, Madre Dolorosa, por el dolor que padeciste al ver morir a tu Hijo clavado en la cruz entre dos ladrones. Haz, Señora, que viva crucificado con mis vicios y pasiones" u otra que brote de tu interior)
Rezar un Ave María .
Sexto dolor : Cuando recibió en sus brazos su Sacratísimo Cuerpo descolgado de la Cruz (leer Mc 15, 42-46)
Breve meditación (por ejemplo: "Me compadezco, Madre Dolorosa, por el dolor que padeciste al recibir en vuestros brazos aquel santísimo cuerpo difunto y desangrado, con tantas llagas y heridas. Haz, Señora, que mi corazón viva herido de amor y muerto a todo lo profano" u otra reflexión que experimentes de hacer).
Rezar un Ave María.
Séptimo dolor Cuando lo depositó en el sepulcro, quedándose Ella en la más triste soledad (Jn 19, 38-42)
Breve meditación (por ejemplo: "Me compadezco, Madre Dolorosa, por el dolor que padeciste en tu soledad, sepultado ya tu Hijo. Haz, Señora, que yo quede sepultado a todo lo terreno y viva sólo para Ti y sienta en mi interior la Pasión de tu Hijo y tus dolores"
u otra reflexión espontánea que brote en ti)
Rezar un Ave María .
4-Oración final
Oh Doloroso e Inmaculado Corazón de María, morada de pureza y santidad, cubre mi alma con tu protección maternal a fin de que siendo siempre fiel a la voz de Jesús, responda a su amor y obedezca a su divina voluntad. Quiero, Madre Mía, vivir íntimamente unido a tu Corazón que está totalmente unido al de tu Divino Hijo. Átame a tu Corazón y al Corazón de Jesús con tus virtudes y dolores. Protégeme siempre. Amén.
Publicación original en Sagrado