domingo, octubre 30, 2011

Falleció la viuda del coronel Ibarzábal, uno de los mártires del Ejército argentino, secuestrado y asesinado en 1974 por la guerrilla

La Unión de Promociones comunicó este viernes (28 oct 2011) el fallecimiento de la señora Nélida Teresa de Agreda, viuda de Ibarzábal, quien fuera esposa del secuestrado y asesinado Coronel (pm) Jorge Roberto Ibarzábal, segundo jefe, en 1974 de la Guarnición Militar de Azul, en un cruento ataque guerrillero -durante la administración constitucional de Juan Domingo Perón- en el que también fue ultimado el jefe de la unidad, coronel Camilo Arturo Gay, junto con su esposa.

“La Unión de Promociones expresa su más profundo pesar, con motivo del reciente fallecimiento de la señora Nélida Teresa de Agreda, viuda. de Ibarzábal, esposa del Coronel (PM) Jorge Roberto Ibarzábal y madre de la Presidente de AfaVitA (Asociación de Familiares y Amigos de Víctimas del Terrorismo en la Argentina), Sra. Silvia Patricia Ibarzábal.

  “Expresamos nuestras sentidas condolencias a todos sus familiares y amigos, rogándole al Señor, les conceda pronta y cristiana resignación”,
dijo el comunicado de la entidad, firmado por el Coronel ® Guillermo César Viola.

     En 1974, el teniente coronel Ibarzábal se desempeñaba como jefe del Grupo de Artillería Blindado 1 de la guarnición militar de la ciudad de Azul, en el centro-este de la provincia de Buenos Aires.

     A la medianoche del 19 de enero de 1974, con el principal objetivo de robar armamento militar, la guarnición fue atacada por un grupo de entre cien y ciento veinte integrantes guerrilleros de la llamada compañía "Héroes de Trelew" del Ejército Revolucionario del Pueblo, a las órdenes de Mario Roberto Santucho, Enrique Gorriarán Merlo y Hugo Irurzun. Los guerrilleros atacaron vistiendo uniformes verdes de combate, armamento de guerra de grueso calibre y cascos parecidos a los del Ejercito Argentino, lo cual hizo difícil su identificación en la oscura noche. Para entrar al cuartel asesinaron al soldado Daniel González que cumplía con el servicio militar obligatorio. Los guerrilleros lograron copar la guardia central, varios puestos de vigilancia y el casino de oficiales, pero encontraron una nutrida resistencia en la zona de baterías y la plaza de armas.