viernes, septiembre 28, 2012

Nuevo cacerolazo el 8/11, pero los impacientes irán al 11/10 en Plaza de Mayo


Finalmente, en las últimas 48 horas, los 100 administradores de los grupos anti K en las redes sociales -especialmente en Facebook- se pusieron de acuerdo para convocar a un segundo cacerolazo el 8 de noviembre en el obelisco, con la consigna: “Basta – Un millón de personas al obelisco y cacerolazo en todo el país”. Quedan así desechadas las fechas tentativas del 28 de septiembre y el 1 de octubre, sobre todo porque la cercanía de esas fechas no daban tiempo para organizar en todo el país una movilización tan importante. Todo indica que el segundo cacerolazo será mucho más importante que la movilización cristinista del 27 de octubre por los dos años de la muerte de Néstor Kirchner.
Los más impacientes
Por otra parte, el 11 de octubre, varios sectores caceroleros que están impacientes se concentrarían en hora a convenir en Santa Fe y Callao para dirigirse a Plaza de Mayo a apoyar la movilización de Pablo Micheli y Hugo Moyano más los movimientos sociales que concurrirían a esa marcha. Hay miles de movilizados que ya tienen por costumbre marchar a la Plaza de Mayo en cada acto opositor y la tentación de concurrir el 11 de octubre es grande. Y además no hay posibilidad alguna de caer en un papelón, ya que la movilización será muy importante, por la presencia de una central obrera, los camioneros y los movimientos sociales. También es posible que concurran sectores políticos opositores con banderas que los identifiquen. La idea dominante es seguirle ganando la calle al gobierno, que moviliza principalmente beneficiarios del Plan Argentina Trabaja y sólo 20.000 militantes de La Cámpora y seguidores de los intendentes, en ambos casos altamente rentados. Así las cosas, en los meses próximos las batallas se darán en las encuestas. El último fin de semana le llevaron a la presidente los resultados de un reciente sondeo, donde su imagen positiva bajó al 30% y el índice de desaprobación mucho más. Mientras tanto, en la calle los opositores y los movilizados del 13-S le quieren demostrar al gobierno que el 7/10 debe tener cuidado con lo que hace con la aplicación de la ley de medios a Clarín. En un ambiente tan sensibilizado, las reacciones podrían ser cada vez mayores.