viernes, junio 27, 2014

Cuatro preguntas de vida o muerte para los capturados por los yihadistas en Irak

Un informe con testimonios de iraquíes liberados por los rebeldes del Estado Islámico de Irak y Levante (EIIL), publicado por The New York Times, revela que en muchos casos los yihadistas someten a los capturados a un test, para saber si son suníes (la corriente del islam del EIIL) o chiíes. Si confirman que son de su rama del islam, los presos son liberados. Si descubren que son chiíes, suelen ser ejecutados.
Suníes y chiíes se consideran mutuamente apóstatas por cuestiones que se remontan a la sucesión de Mahoma, y por diferencias en la interpretación del Corán.



La primera cuestión que someten a los capturados es el nombre. Los chiíes utilizan mucho el de Ali, el yerno de Mahoma, y el de sus hijos Husein, Hasan y Abas.
La segunda es la ciudad de procedencia. El norte de Irak es de mayoría suní, pero hay en todas las ciudades enclaves chiíes. Si el capturado procede de ese lugar, será con muchas probabilidades ejecutado.
La tercera pregunta se refiere a cómo reza. Los suníes lo hacen con las manos o los brazos cruzados por encima del estómago. Los chiíes rezan con los brazos extendidos y las palmas encima de los muslos. En un truculento vídeo subido a la red por el EIIL hace un año se ve cómo milicianos suníes detienen a tres conductores de camiones en el desierto, y les preguntan si son suníes o chiíes. Los tres declaran ser suníes. Las preguntas se vuelven más inquisitivas y, al hablar de las técnicas para rezar, los tres no se ponen de acuerdo y son ejecutados sobre el terreno.
La cuarta pregunta se relaciona con la música preferida. Hay música religiosa chií y suní que da muchas pistas. Los yihadistas se guían también por la melodía del móvil, que a veces es una melodía sacra popular.